6.1.11

Próximas lecturas, qué felicidad


Ya les he contado que todos los veranos encaro la lectura de algún clásico. Siempre recuerdo aquel famoso enero en Chapadmalal, cuando me devoré La Guerra y la Paz, o aquel verano de lluvia en el sur, y yo con las narices dentro del La Montaña Mágica.
Pero este año no. El envión rutinario y estival se detiene justo acá, en enero de 2011.

Pasó lo que pasó: durante el año fui haciendo acopio de libros; uno sobre el otro los he ido apilando, y hoy la torre de papel llega casi al cielo. Llegó la hora de la selección.
Saben también que me gusta mucho la literatura argentina, me interesa saber qué se escribe aquí y ahora, pero parece que este gusto se ha potenciado últimamente. Miren, esto es lo que voy a leer mientras dure la calma chicha, los días sin horarios, las noches en vela:

Autores argentinos:

Los modos de ganarse la vida, Ignacio Molina, Entropía
Cuando me muera quiero que me toquen cumbia, Christián Alarcón, Norma
Buenos Aires, la ciudad como un plano, Crónica y relatos, La Bestia Equilátera Una idea genial, Inés Acevedo, Mansalva
El escritor comido, Sergio Bizzio, Mansalva
Precipitaciones aisladas, Sebastián Marínez Daniell, Entropía
Desalmados, María Martoccia, La Bestia Equilátera
Otros:

Los secretos de Romina Lucas, Ercole Lissardi, Biblioteca Lissardi
Mamá, Joyce Carol Oates, Alfaguara
Mi madre, Richard Rord, Anagrama
La mujer temblorosa o la historia de mis nervios, Siri Hustvedt, Anagrama
Éramos unos niños, Patti Smth, Lumen
Biografía del hambre, Amelie Nothomb
El sabotaje amoroso, Amelie Nothomb
Entre dos fuegos, Vida del padre Mugica, Mártín De Biase, Ediciones de la Flor

Ya leí el de Molina.
Estoy con Precipitaciones aisladas.

(Cada tanto me ataca la ansiedad, quiero leer ya el de Patti Smith; no, mejor sigo con el de Siri... qué será eso de los temblores, me pregunto. Ay, pero cómo me gusta Amelie Nothbom).

Soy un caos, ya lo sé. Carezco de método lector, pero no me importa, mientras haya disfrute, qué más da.