Todas las noches, dentro de ese círculo de tareas rutinarias que forman parte de la ceremonia de despedir el día y prepararse para apagar la luz, una de las infaltables es: hacer la lista para el día siguiente, primera versión. Porque habrá otras. Como si el acomodar las mil cosas pendientes en una prolija lista me hiciera sentir que ya algo está hecho: la intención, el deseo, la voluntad. Pero, digamos la verdad, hay ciertos ítems que ahí quedan, empantanándose en la primera lista, y luego en otro y en otra y en otra. Las ya viejas, como cadáveres, van quedando olvidadas por ahí. Ayer encontré, dentro de un libro leído hace años, una lista muy curiosa y me asombré de aquella parte mía. Una lista como testigo del tiempo, casi garabateada sobre un papel ajado. Épocas de crianza de hijos, de otras amistades, de trabajos olvidados. Hay marcas de nuestra personalidad y de nuestra historia en esos papeles prolijos o escritos en la oscuridad de la noche.
Ahora sí, es hora de empezar a reacomodar , con este lápiz y en este papel, la lista de lo que me espera en este primaveral día.
Ahora sí, es hora de empezar a reacomodar , con este lápiz y en este papel, la lista de lo que me espera en este primaveral día.
9 comentarios:
¿Y nunca te pasó que, ya acostada y dispuesta a dormir, te acordaras de algo MUY importante y, por las dudas, te levantaste para agregarlo a la lista?
Mis listas vienen arrastrando de largo tiempo, encabezándolas, cosas que en el fondo no quiero hacer, y que el tiempo después soluciona.
(Sartre decía que si uno no decide, los demás deciden por uno)
¡buenísimo Estrella!! Mis listas siempre tienen hijitos!! Tacho uno y crecen diez!! Jajaja...
Hace tiempo escribí (si bucea en mi blog lo encontrará) algo sobre las listas que uno modifica, constantemente. A la noche estoy demasiado cerca de la confusión de realidades como para ejecutar algún ritual. Sigo rezando (aunque no crea) e imagino una escena en la que me quedo dormido.
Saludos, Estrella.
En mi realidad, lista es casi sinonimo de utopia, como agenda o cualquier tipo de "ordenador", casi incluyendo este.
Tambien es verdad que muchas veces la "lista" me ayuda a calmar ansiedades
Si sos una fan FAN de las piolas, vas a tener que bancarte mi comentario pedorro, porque soy un esclavo de las listas y armando una lista de películas freaks para el bloque de la radio me dormí no sé a qué hora, y con el sueño que tengo no se me ocurre nada.
qUE BUENO LO QUE ESCRIBISTE, QUE REAL Y QUE IDENTIFICADA ME SIENTO...
sALUTE!
crab,
claro, he llegado a levantarme más de una vez. Ay, esas noches en que la cabeza no para...
Anónimo,
¿Alguna vez podremos decir: misión cumplida? Lo dudo.
Caballero,
estoy feliz por su visita.
Imaginar la escena en donde uno se queda dormido: esta noche probaré.
Voy para su blog, uno de mis preferidos.
¡Gracias!
Jotafrisco,
¡sos lo más! Decididamente, soy tu FAN.
Eduardo,
has dado con la expresión justa: las listas ayudan a calmar ansiedades. Yo no podría vivir sin ellas. Horror.
Almendra,
bienvenida. Qué bueno que te gustó, a veces uno no sabe si lo que escribe interesa o no.
Gracias por pasar por acá!
Estrella:
Esto que ha escrito hizo que fuera ordenando mis estantes de libros...
No encuentro las anotaciones que he dejado entre ellos. Quizás las encuentre..
Tengo eso de no guardar nada que me moleste, costumbre falible de mi auto-terapia.
Pondré condiciones:
De ahora en mas, un bolígrafo, un cuaderno..
Y dejar de ser un obsesivo obediente del tacho de basura.
Mis listas son caóticas como yo. No se para que las hago porque despues no les doy bola, pero las necesito. Me parece que es más de las mujeres que de los hombres, porque las pobres tiene más lío que nosotros.
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