Hago otro paréntesis entre tantos balances, porque tengo muchas ganas de entusiasmarlos con estos libros encadenados, un buen regalo para ese alguien ávido de lecturas que siempre tenemos cerca.
No sé ustedes, pero cuando a mí un libro me gusta, le sigo las huellas como el mejor de los detectives: no sólo quiero leer sus otros libros, sino también lo que ese autor ha ido leyendo, lo que otros escribieron sobre él; quiero saber cómo se las ha arreglado en la vida para contar aquello que acabó deslumbrándome.
No sé ustedes, pero cuando a mí un libro me gusta, le sigo las huellas como el mejor de los detectives: no sólo quiero leer sus otros libros, sino también lo que ese autor ha ido leyendo, lo que otros escribieron sobre él; quiero saber cómo se las ha arreglado en la vida para contar aquello que acabó deslumbrándome.
Se me dirá que no son estas épocas para regalar ¡cuatro libros! Y tendrán razón. Pero vale todo: pagado en doce cuotas..., usado, prestado, jamás: afanado.
Va:
1) Madame Bovary, de Gustave Flaubert.
Solamente un autor cuyo propósito en la vida fue escribir y no vivir, pudo dar forma a este personaje que contiene algo de todas las mujeres y de todos los hombres. Recluido en su cada de piedra, en la ribera del Sena, trabajó duramente, con hábitos metódicos, con el objetivo fundamental de contar una vida sin juzgarla. Así nace Emma, la que no es feliz, la que se aburre, la que sólo quiere ser la heroína de la mejor de las novelas románticas.
2) La orgía perpetua, de Mario Vargas Llosa.
"Desde las primeras líneas el poder de persuasión del libro operó sobre mí de manera fulminante. Hacía años que ninguna novela vampirizaba tan rápidamente mi atención, abolía así el contorno físico y me sumergía tan hondo en su materia, A medida que avanzaba la tarde, caía la noche, apuntaba el alba, era más efectivo el trasvasamiento mágico, la sustitución del mundo real por el ficticio [...]. Cuando desperté, tuve dos certidumbres, como dos relámpagos: que ya sabía qué escritor me hubiera gustado ser y que desde entonces y hasta la muerte viviría enamorado de Emma Bovary".
3) Cartas a Lousie Colet, de G. Flaubert.
Más que sólo cartas: confesiones, ensayo, diario, memorias. Algo así como la historia de la escritura de la novela:
"Empecé ayer noche mi novela. Ahora entreveo dificultades de estilo que me espantan".
Va:
1) Madame Bovary, de Gustave Flaubert.
Solamente un autor cuyo propósito en la vida fue escribir y no vivir, pudo dar forma a este personaje que contiene algo de todas las mujeres y de todos los hombres. Recluido en su cada de piedra, en la ribera del Sena, trabajó duramente, con hábitos metódicos, con el objetivo fundamental de contar una vida sin juzgarla. Así nace Emma, la que no es feliz, la que se aburre, la que sólo quiere ser la heroína de la mejor de las novelas románticas.
2) La orgía perpetua, de Mario Vargas Llosa.
"Desde las primeras líneas el poder de persuasión del libro operó sobre mí de manera fulminante. Hacía años que ninguna novela vampirizaba tan rápidamente mi atención, abolía así el contorno físico y me sumergía tan hondo en su materia, A medida que avanzaba la tarde, caía la noche, apuntaba el alba, era más efectivo el trasvasamiento mágico, la sustitución del mundo real por el ficticio [...]. Cuando desperté, tuve dos certidumbres, como dos relámpagos: que ya sabía qué escritor me hubiera gustado ser y que desde entonces y hasta la muerte viviría enamorado de Emma Bovary".
3) Cartas a Lousie Colet, de G. Flaubert.
Más que sólo cartas: confesiones, ensayo, diario, memorias. Algo así como la historia de la escritura de la novela:
"Empecé ayer noche mi novela. Ahora entreveo dificultades de estilo que me espantan".
"No es pequeño asunto el ser sencillo".
"Aún con muchos andamiajes dramáticos, falta lo dramático".
"Escribir me pone en un estado de permanente acritud, y siempre estoy a disgusto con lo que hago. La idea me estorba. La forma se me resiste. Desde hace cuatro días he escrito tres páginas, y detestables, flojas, blandas, aburridas".
"Cuando esté acabada mi novela, te llevaré mi manuscrito. Ya verás a través de qué complicada mecánica logro hacer una frase".
4) El loro de Flaubert, de Julian Barnes.
Un escritor decide desmenuzar la vida de Flaubert porque no le alcanza su obra.
¿Ficción, realidad, ensayo? Como lectores, la empatía con Barnes es absoluta: queremos más, ¡queremos todo!
¡Ojalá alguno ligue el Combo I!
"Aún con muchos andamiajes dramáticos, falta lo dramático".
"Escribir me pone en un estado de permanente acritud, y siempre estoy a disgusto con lo que hago. La idea me estorba. La forma se me resiste. Desde hace cuatro días he escrito tres páginas, y detestables, flojas, blandas, aburridas".
"Cuando esté acabada mi novela, te llevaré mi manuscrito. Ya verás a través de qué complicada mecánica logro hacer una frase".
4) El loro de Flaubert, de Julian Barnes.
Un escritor decide desmenuzar la vida de Flaubert porque no le alcanza su obra.
¿Ficción, realidad, ensayo? Como lectores, la empatía con Barnes es absoluta: queremos más, ¡queremos todo!
¡Ojalá alguno ligue el Combo I!
6 comentarios:
Buen combo estrella;
pregunta : el final del comentario del libro de vargas llosa habla de emma bovary que es el primer libro ¿ es correcto ?
Sobredosis de Flaubert!.
Bueno, nadie saldrá muerto de eso...
Estrella, no está mal la idea de hacer un lote como ese; aunque a mí en realidad me gusta, cuando disfruto mucho con un libro , seguir la pista yo mismo e ir buscando lo que se relaciona con él, pero a mi aire, no que me den ya el trabajo hecho... Un beso y felicidades, amiga,
V.
estrella seguimos conectados por algún hilo invisible!!!
acabo de comprar "la educación sentimental"...
Estrella;
Una genial recomendación. Es lindo leer así, en cadena, pero a veces a mí me puede saturar un poco. Voy a pensar en algún otro combo para retribuir el favor.
Felicidades
P.
HUGO,
Es verdad,¡mirá que hay libros!
POL MARÍAS,
Puede ser; a mí me encantaron los cuatro.
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